Debate antiterrorista reaparece en campaña de EEUU tras atentados en Bruselas
Pero no suponen aún la máxima preocupación para los votantes de cara a las elecciones presidenciales de este noviembre.
Los atentados de esta semana en Bruselas encendieron de nuevo el debate antiterrorista en la campaña presidencial de EE.UU., donde las propuestas de la favorita de los demócratas, Hillary Clinton, contrastan con las radicales medidas presentadas por sus rivales republicanos Donald Trump y Ted Cruz.
La creciente amenaza terrorista que vive Europa ha incrementado el temor en suelo estadounidense a posibles ataques dentro del país, aunque el riesgo y las pérdidas acaecidas en el Viejo Continente no suponen aún la máxima preocupación para los votantes de cara a las elecciones presidenciales de este noviembre.
No obstante, los candidatos de ambos partidos han reaccionado a la situación de un modo que para los expertos era previsible, dado el devenir que ha tomado este ciclo electoral.
"No estoy sorprendido de que Cruz y Trump hayan afilado su retórica sobre el tema, se esperaba totalmente", dijo a Efe el profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Northern Iowa, Christopher Larimer.
Trump, líder en la carrera republicana a la Casa Blanca, abogó esta semana por cambiar la "obsoleta" Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para que sume el combate al terrorismo a su misión actual de defensa colectiva de los Estados miembros, y también consideró que EE.UU. debería aportar menos financiación a esa alianza.
Cruz se opuso a la propuesta de Trump, pero opinó que el Gobierno estadounidense debería poner en marcha un programa de patrulla policial en los barrios musulmanes con el objetivo de poder detectar y paliar episodios como el ocurrido en Bruselas.
Una medida en la línea que planteaba el multimillonario tras los ataques ocurridos en París en noviembre pasado sobre prohibir la entrada a EE.UU. a quienes profesen el Islam.
El impacto social que tienen acontecimientos de este tipo puede suponer un cambio radical en la intención de voto del país, especialmente susceptible desde los atentados del 11 de septiembre de 2001, si bien aún es temprano para dirimir si marcará la diferencia en los resultados presidenciales.
"Que favorezca a uno u otro candidato dependerá de la medida en que la seguridad nacional y el terrorismo sean temas dominantes este otoño. Ambas cuestiones estuvieron en el radar público y de manera más sobresaliente en diciembre del año pasado después de los ataques en París", apuntó Larimer respecto al pueblo estadounidense.
"En los últimos tres meses, sin embargo, la preocupación pública en EE.UU. sobre ambas cuestiones ha disminuido dramáticamente y son más los que consideran las cuestiones económicas como algo prioritario", agregó.
En este sentido, el experto apunta que, en caso de que en noviembre no haya la sensación de una amenaza inminente contra EE.UU., la retórica de los aspirantes conservadores "alejará potencialmente a un gran número de votantes independientes", sobre todo en el caso de Trump, que "ya tiene una alta calificación desfavorable entre este grupo de votantes".
"Si soy presidente, vamos a ser muy duros, muy fuertes y vigilantes. No dejaremos que eso pase en nuestro país y, si pasa, los atraparemos (a los terroristas) y los haremos sufrir muchísimo", advirtió Trump, favorable a aplicar la tortura a los terroristas detenidos, tras tener noticias de los ataques en Bruselas.
Por su parte, Clinton se desmarcó profundamente de ambos conservadores y planteó una respuesta contra el Estado Islámico (EI), quien asumió la autoría de los atentados, basada en la mejora de los servicios de inteligencia, el desmantelamiento de los feudos yihadistas en Irak y Siria, y el fortalecimiento de la diplomacia internacional.
En un discurso en la Universidad de Stanford (California), la ex secretaria de Estado aseguró que tanto Trump como Cruz, quienes se disputan la candidatura de su partido a la Casa Blanca, harían de EE.UU. un país "menos seguro" y del mundo "un lugar más peligroso".
Las encuestas posteriores a los ataques de París indicaron un aumento de la preocupación sobre las amenazas terroristas y, a falta de un sondeo similar tras lo ocurrido en Bruselas, era Clinton quien en los meses posteriores a los atentados en la capital francesa contaba con la mayor confianza de los estadounidenses para enfrentar el problema.
"En las encuestas en noviembre y diciembre, Clinton fue la primera elección de los votantes en general para hacer frente al terrorismo, con Trump segundo", apuntó a Efe el también experto en política estadounidense Justin Whitely Holmes.
"Donde Clinton parece tener la ventaja es en la experiencia y la capacidad de parecer dura sin parecer irracional", indicó Whitely Holmes.
"Dicho esto -agregó-, es posible que Trump pueda ganar en este tema si la gente se siente más preocupada por el terrorismo y abrazan su 'dureza'. Los expertos en política exterior en general piensan que sería terrible en esta cuestión, pero no cierto grupo de electores a quienes su dureza en este tema les resulta atractiva".
EFE